domingo, 15 de septiembre de 2013

PPensiones a dieta

 
     Tras el fiasco de Madrid 2020, a los de la gaviota se les ha desvanecido otra de sus cortinas de humo con la que ocultar su patética gestión. Los peperos han perdido una nueva oportunidad de pelotazo y los ciudadanos muchos millones de euros públicos, aunque sin cuantificar. Ya sabéis, transparencia PP. Al menos dos cosas han quedado claras con la vuelta a la dura realidad, que  los del COI prefieren el sake al "relaxing cup of café con leche" y que los españoles nos tenemos que poner las pilas para parar los nuevos recortes genoveses.
 
 
     La más inmediata amenaza de los pajarracos, es su reforma de las pensiones. Un nuevo recorte de derechos con el que el gobierno del bobo pretende que le salgan algo mejor las cuentas y que de nuevo castiga a los más débiles. Un recorte que empobrecerá progresivamente a los pensionistas, hasta un 28.3% según los sindicatos en 15 años. Un recorte que basado en falacias demográficas, devolverá a nuestros mayores a sufrir las estrecheces que padecían los ancianos del franquismo. Un recorte, eso sí, del que se siente orgullosa la repugnante ministra del PParo, Fátima Báñez, la cual ha llegado a afirmar, que los pensionistas deberían agradecer sus reformas. Pero...¿qué le tienen que agradecer los pensionistas...?¿El copago farmacéutico, el PPensionazo o tener que mantener hijos y nietos "sine die" con sus recortadas pensiones?
 
     Para llegar al PPensionazo, los de Génova encargaron un interesado informe a un comité de expertos nombrados a dedo y con intereses en banca y empresas de seguros, así no había posibilidad de fallo. Una vez recibido el panfleto de los expertos, se decidió desligar el incremento de las pensiones del IPC, apareciendo el ya famoso factor de sostenibilidad, con el que los pajarracos dicen garantizar el futuro de las pensiones, dado el envejecimiento de la población debido a la mayor esperanza de vida. Con todo esto, el gobierno propone una "generosa" subida de un 0.25% en los años de crisis, llegando al IPC, en los años de bonanza. He aquí la razón por la que según los peperos, los pensionistas deberían estar agradecidos. ¿Agradecerían ellos que Bárcenas les hubiera metido en el sobre 25 euros en vez de 25.000...? Le habrían dicho  de todo, pues eso es lo que a mí me pide el cuerpo. El caso es que una viuda que cobre 600 euros de pensión, es probable que en 2014 vea incrementada su paguita en nada menos que 1.5 euros al mes. Vaya, que no le llega para el café que proponía la Botella.
 
     Hay que desmontar estas nuevas mentiras de los de la gaviota, porque el problema de las pensiones, es básicamente económico y no demográfico. El gasto en pensiones, es de unos 9 puntos del PIB, una miseria comparado con lo demás. Y el hecho  de que la población envejezca, nunca supuso un problema, dado que la economía del país ha ido creciendo exponencialmente. Habrá que buscar la manera de incrementar los ingresos de la seguridad social y para ello, hay que atajar la cifra, ¡su cifra! un 27% de paro. Pero no con trabajos precarios que prácticamente no aportan nada a las arcas del estado, sino buscando empleo estable en nuevas tecnologías, nuevas energías. Buscar la competitividad en I+D y no en los sueldos basura. Hay que arriesgar en la búsqueda de soluciones y no agarrarse a la rancia ideología "neocon", tan rancia como Rajoy, tan rancia como la fallida candidatura de Madrid 2020.
 
     Por último un recuerdo para Víctor Jara, torturado y asesinado, hace hoy 40 años, en el Chile del criminal Pinochet.
 


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